Estamos convencidos que lo mejor que le puede pasar a una modalidad deportiva es que existan problemas económicos para que dicha modalidad busque alternativas, soluciones y acciones con imaginación para salir de un letargo.
Muchas han sido las federaciones, que tras un periodo sin medios con lo que salir adelante, han buscado en la unión de pequeñas fuerzas la suficiente entidad para cumplir con los objetivos a los que se debe por mandato.
Todos menos el automovilismo. Todos menos el automovilismo canario. Todos menos aquellos que con sus personalismos y guerras intestinas, solo buscan poner la zancadilla a todo aquel que no comulgue con sus inventos.
Esta semana que acaba nos llegan dos comunicados que nos han producido auténtico estupor al leer su contenido. El primero de ellos, la suspensión de una prueba de slalom y la segunda el enfrentamiento entre federaciones por como y donde realizar pruebas de karting.
Sobre el circuito de Hoya Niebla no es la primera vez que apelo al sentido de la inventiva para darle la vuelta a una modalidad que poco a poco ha ido cayendo en la apatía más absoluta. El Circuito Islas Canarias ha pasado de ser referente mundial en la época de la celebración de la Carrera de Campeones a ser ahora mismo un lugar donde, al no hacerse modificaciones y darle un nuevo atractivo para que los participantes acudan, la apatía se ha instalado y han llegado las consecuencias. La desbandada de participantes propiciada por el aburrimiento ante demandas de mejoras y nuevas alternativas.
Lo del segundo comunicado no tiene otra calificación que vergonzoso. Que una Federación Canaria le niegue la correspondiente autorización a una Federación Interinsular, sin antes llegar a un consenso, carece de calificativos publicables. Con el agravante de que en las dos islas, Lanzarote y Gran Canaria, cuentan con instalaciones modélicas para la practica del Karting en inmejorables condiciones y que por no saber o no querer retomar las conversaciones con su propietario, están sin poder ser usadas.
La guerra soterrada entre la Federación Canaria y la Interinsular de Las Palmas ya se hace pública y quienes salen perjudicados son como siempre, los deportistas.
Para que los lectores se hagan su correspondiente posicionamiento ante este tema, trascribo literal el último comunicado emitido sobre el tema:
Negativa de la Federación Canaria a la unión de las carreras de karting de Lanzarote y Gran Canaria propuesta por la FALP
Con el objeto de reducir los costes de participación y mejorar la seguridad de las pistas utilizadas para las pruebas de karting, la Federación de Automovilismo de Las Palmas solicitó la posibilidad de realizar la prueba correspondiente a la isla de Lanzarote del nuevo certamen autonómico, conjuntamente con la carrera del Trofeo de Gran Canaria, tanto por la coincidencia de las fechas programadas como debido a la baja participación de pilotos lanzaroteños.
Los pilotos de Lanzarote, que serían los más perjudicados por el cambio, se les subvencionarían el coste completo del desplazamiento a Gran Canaria y así podrían participar de nuevo en la prueba del Circuito de Maspalomas de los próximos días 14 y 15 de julio.
Solventado el principal escollo, la FALP considera que con este cambio de escenario, el coste del transporte para el resto de los pilotos y equipos de otras islas también se vería reducido al centrarse la carrera en Gran Canaria, pues en la mayoría de los casos se están ahorrando un trayecto de barco.
Después del escrito dirigido al presidente de la Federación Canaria, Carlos Gaztañaga, solicitando el traslado de la cita lanzaroteña a Gran Canaria, se responde negativamente en primera instancia por la negativa manifestada por las federaciones de Santa Cruz de Tenerife y La Palma, ya que entienden que el campeonato tiene necesariamente que disputarse en todas las islas, tengan o no circuitos permanentes disponibles.
La carrera tendría que disputarse en un trazado urbano, al igual que en La Palma. En el caso de Lanzarote sí existen dos circuitos permanentes, pero no están disponibles ahora mismo para la organización de carreras oficiales de karting, ya que sus propietarios no autorizan la utilización con estos fines deportivos.
Por todo ello, la FALP seguirá insistiendo en reactivar el karting facilitando la participación al unir las pruebas por el bien de los dos campeonatos. Esta solicitud de la FALP está respaldada por el criterio de la última reunión con los pilotos o sus representantes, muy preocupados por la seguridad, ya que entienden que no se pueden cumplir los requisitos mínimos en los circuitos urbanos, como es el caso de Lanzarote, donde no existe un espacio adecuado para organizar una carrera regional.
Esto marcha, señores. Esto marcha: Sobre todo con el final del comunicado: En Lanzarote no existe un espacio adecuado para organizar una carrera regional.
Mentira. Eso es mentira. Así de claro. El espacio existe. Lo que no hay son ganas, formas, maneras de solucionar las adversidades y retomar las conversaciones.
Se están cargando el deporte y siguen sin admitirlo.
Muchas han sido las federaciones, que tras un periodo sin medios con lo que salir adelante, han buscado en la unión de pequeñas fuerzas la suficiente entidad para cumplir con los objetivos a los que se debe por mandato.
Todos menos el automovilismo. Todos menos el automovilismo canario. Todos menos aquellos que con sus personalismos y guerras intestinas, solo buscan poner la zancadilla a todo aquel que no comulgue con sus inventos.
Esta semana que acaba nos llegan dos comunicados que nos han producido auténtico estupor al leer su contenido. El primero de ellos, la suspensión de una prueba de slalom y la segunda el enfrentamiento entre federaciones por como y donde realizar pruebas de karting.
Sobre el circuito de Hoya Niebla no es la primera vez que apelo al sentido de la inventiva para darle la vuelta a una modalidad que poco a poco ha ido cayendo en la apatía más absoluta. El Circuito Islas Canarias ha pasado de ser referente mundial en la época de la celebración de la Carrera de Campeones a ser ahora mismo un lugar donde, al no hacerse modificaciones y darle un nuevo atractivo para que los participantes acudan, la apatía se ha instalado y han llegado las consecuencias. La desbandada de participantes propiciada por el aburrimiento ante demandas de mejoras y nuevas alternativas.
La guerra soterrada entre la Federación Canaria y la Interinsular de Las Palmas ya se hace pública y quienes salen perjudicados son como siempre, los deportistas.
Para que los lectores se hagan su correspondiente posicionamiento ante este tema, trascribo literal el último comunicado emitido sobre el tema:
Negativa de la Federación Canaria a la unión de las carreras de karting de Lanzarote y Gran Canaria propuesta por la FALP
Con el objeto de reducir los costes de participación y mejorar la seguridad de las pistas utilizadas para las pruebas de karting, la Federación de Automovilismo de Las Palmas solicitó la posibilidad de realizar la prueba correspondiente a la isla de Lanzarote del nuevo certamen autonómico, conjuntamente con la carrera del Trofeo de Gran Canaria, tanto por la coincidencia de las fechas programadas como debido a la baja participación de pilotos lanzaroteños.
Los pilotos de Lanzarote, que serían los más perjudicados por el cambio, se les subvencionarían el coste completo del desplazamiento a Gran Canaria y así podrían participar de nuevo en la prueba del Circuito de Maspalomas de los próximos días 14 y 15 de julio.
Solventado el principal escollo, la FALP considera que con este cambio de escenario, el coste del transporte para el resto de los pilotos y equipos de otras islas también se vería reducido al centrarse la carrera en Gran Canaria, pues en la mayoría de los casos se están ahorrando un trayecto de barco.
Después del escrito dirigido al presidente de la Federación Canaria, Carlos Gaztañaga, solicitando el traslado de la cita lanzaroteña a Gran Canaria, se responde negativamente en primera instancia por la negativa manifestada por las federaciones de Santa Cruz de Tenerife y La Palma, ya que entienden que el campeonato tiene necesariamente que disputarse en todas las islas, tengan o no circuitos permanentes disponibles.
La carrera tendría que disputarse en un trazado urbano, al igual que en La Palma. En el caso de Lanzarote sí existen dos circuitos permanentes, pero no están disponibles ahora mismo para la organización de carreras oficiales de karting, ya que sus propietarios no autorizan la utilización con estos fines deportivos.
Por todo ello, la FALP seguirá insistiendo en reactivar el karting facilitando la participación al unir las pruebas por el bien de los dos campeonatos. Esta solicitud de la FALP está respaldada por el criterio de la última reunión con los pilotos o sus representantes, muy preocupados por la seguridad, ya que entienden que no se pueden cumplir los requisitos mínimos en los circuitos urbanos, como es el caso de Lanzarote, donde no existe un espacio adecuado para organizar una carrera regional.
Esto marcha, señores. Esto marcha: Sobre todo con el final del comunicado: En Lanzarote no existe un espacio adecuado para organizar una carrera regional.
Mentira. Eso es mentira. Así de claro. El espacio existe. Lo que no hay son ganas, formas, maneras de solucionar las adversidades y retomar las conversaciones.
Se están cargando el deporte y siguen sin admitirlo.
