Los vehículos corporativos son recursos sumamente valiosos que forman parte de cualquier empresa. Están considerados como herramientas de trabajo que cumplen múltiples funciones, como traslados de personal, logística de insumos y despacho de productos, entre otras.
Antes de incorporarlos en su haber, las organizaciones evalúan las diferentes alternativas existentes en el mercado para seleccionar aquellas que sean más beneficiosas desde el punto de vista económico y que también se adapten a sus necesidades específicas.
En la actualidad, el riesgo financiero de la compra hace que cada vez más empresas opten por el renting. Sin lugar a dudas, este es un tema que hay que conocer a mayor profundidad para sacarle el máximo provecho.
El renting de vehículos
Si bien es cierto que la experiencia de comprar un coche propio genera altos niveles de satisfacción, hoy en día han surgido otras propuestas muy interesantes. Estas también saben captar la atención de particulares, autónomos y empresas.
Las acostumbradas formas de adquisición de bienes y servicios ahora son muy diferentes. La satisfacción del cliente suele ser la prioridad y esto incluye ofrecer soluciones prácticas que propicien el beneficio común.
Cada vez más empresas o negocios, indistintamente de su tamaño, descubren las ventajas que les ofrece el renting para empresas y optan por esta innovadora modalidad. Consiste en un contrato de alquiler para hacer uso de un vehículo con todo incluido a cambio de una cuota fija mensual.
En el mencionado acuerdo se estipulan todas las condiciones y definen los criterios a convenir entre las partes. El usuario recibe un coche completamente operativo desde el punto de vista técnico, mecánico y administrativo, así que no tendrá nada de qué preocuparse.
Peligros financieros de las compras de vehículos
El renting de coches cobra mayor popularidad cada día. Muchos inversores se han dado cuenta de los importantes peligros financieros que supone la compra de coches. A continuación, se mostrarán algunas consideraciones de interés.
- La compra de una flota de coches incrementa el endeudamiento de la empresa y lo más probable es que sea necesario hacer uso de diferentes fuentes de financiación. Esto significa un mayor endeudamiento.
- Los vehículos se devalúan con el paso del tiempo. El uso provoca el desgaste normal o ciertas averías. Para esto será necesario contar con una buena cantidad de dinero a fin de cubrir con los gastos asociados a reparaciones, mantenimiento, revisiones, reemplazo de piezas, entre otros.
- Los bienes adquiridos deben ser reflejados en el patrimonio y balance de la empresa.
- Los propietarios tienen que generar diferentes procesos administrativos en términos contables, disponer de mayor tiempo para canalizar la contratación de seguros, pago de impuestos, movilización para revisiones mecánicas y más.
- Comprar una flota de vehículos es una decisión que requiere de un análisis minucioso previo. Sobre todo, cuando no existe suficiente liquidez o se desconoce la viabilidad de determinado negocio en el tiempo.
En ese sentido, las compras de coches para empresas han pasado a un segundo plano por muy buenas razones.
Una solución inteligente al alcance de todos
El servicio de renting de coches para empresas que ofrece Vamos ha destacado por ser una alternativa muy eficaz. Los usuarios pueden olvidarse de todas las preocupaciones asociadas a detalles mecánicos o técnicos y enfocan toda la atención al desarrollo de sus actividades comerciales.
Esta modalidad se adapta a los diferentes contextos empresariales y suele ser muy beneficiosa para evitar desembolsos importantes. Claramente resulta indispensable considerar los pros y contras de cada alternativa teniendo en cuenta el uso que se le dará a cada unidad y rentabilidad a largo plazo.
Las principales ventajas del renting de coches
Esta opción ha transformado la perspectiva de muchos empresarios gracias a que ofrece numerosas prestaciones, tales como:
- El pago de una cuota mensual fija incluye todos los gastos del coche en cuanto a mantenimiento, seguro, impuestos, cambio de neumáticos, entre otros.
- Disponibilidad de un coche de sustitución en caso de que el vehículo presente alguna avería que implique su paralización.
- No es necesario disponer de una alta suma de dinero para contar con una flota de coches operativa que permita poner en marcha las actividades cotidianas de cualquier negocio.
- La gestión administrativa es mucho más sencilla. El empresario sólo debe reflejar en sus cuentas la cantidad correspondiente al pago de un servicio que será un gasto deducible en las declaraciones de impuestos.
- Estipular el plazo del contrato de alquiler permite que, al llegar a su fin, el solicitante tenga la posibilidad de actualizar a modelos más nuevos si así lo prefiere.
- No hay pérdidas de tiempo para gestionar trámites como la financiación ante una entidad financiera, contratación de seguros, mantenimiento del vehículo, pagos de impuestos, entre otros.
- La opción del renting de coches se incrementa cada día y esto abre las posibilidades de que la oferta sea mayor, con tarifas mucho más accesibles y ajustadas a los requerimientos empresariales.
Antes de incorporarlos en su haber, las organizaciones evalúan las diferentes alternativas existentes en el mercado para seleccionar aquellas que sean más beneficiosas desde el punto de vista económico y que también se adapten a sus necesidades específicas.
En la actualidad, el riesgo financiero de la compra hace que cada vez más empresas opten por el renting. Sin lugar a dudas, este es un tema que hay que conocer a mayor profundidad para sacarle el máximo provecho.
El renting de vehículos
Si bien es cierto que la experiencia de comprar un coche propio genera altos niveles de satisfacción, hoy en día han surgido otras propuestas muy interesantes. Estas también saben captar la atención de particulares, autónomos y empresas.
Las acostumbradas formas de adquisición de bienes y servicios ahora son muy diferentes. La satisfacción del cliente suele ser la prioridad y esto incluye ofrecer soluciones prácticas que propicien el beneficio común.
Cada vez más empresas o negocios, indistintamente de su tamaño, descubren las ventajas que les ofrece el renting para empresas y optan por esta innovadora modalidad. Consiste en un contrato de alquiler para hacer uso de un vehículo con todo incluido a cambio de una cuota fija mensual.
En el mencionado acuerdo se estipulan todas las condiciones y definen los criterios a convenir entre las partes. El usuario recibe un coche completamente operativo desde el punto de vista técnico, mecánico y administrativo, así que no tendrá nada de qué preocuparse.
Peligros financieros de las compras de vehículos
El renting de coches cobra mayor popularidad cada día. Muchos inversores se han dado cuenta de los importantes peligros financieros que supone la compra de coches. A continuación, se mostrarán algunas consideraciones de interés.
- La compra de una flota de coches incrementa el endeudamiento de la empresa y lo más probable es que sea necesario hacer uso de diferentes fuentes de financiación. Esto significa un mayor endeudamiento.
- Los vehículos se devalúan con el paso del tiempo. El uso provoca el desgaste normal o ciertas averías. Para esto será necesario contar con una buena cantidad de dinero a fin de cubrir con los gastos asociados a reparaciones, mantenimiento, revisiones, reemplazo de piezas, entre otros.
- Los bienes adquiridos deben ser reflejados en el patrimonio y balance de la empresa.
- Los propietarios tienen que generar diferentes procesos administrativos en términos contables, disponer de mayor tiempo para canalizar la contratación de seguros, pago de impuestos, movilización para revisiones mecánicas y más.
- Comprar una flota de vehículos es una decisión que requiere de un análisis minucioso previo. Sobre todo, cuando no existe suficiente liquidez o se desconoce la viabilidad de determinado negocio en el tiempo.
En ese sentido, las compras de coches para empresas han pasado a un segundo plano por muy buenas razones.
Una solución inteligente al alcance de todos
El servicio de renting de coches para empresas que ofrece Vamos ha destacado por ser una alternativa muy eficaz. Los usuarios pueden olvidarse de todas las preocupaciones asociadas a detalles mecánicos o técnicos y enfocan toda la atención al desarrollo de sus actividades comerciales.
Esta modalidad se adapta a los diferentes contextos empresariales y suele ser muy beneficiosa para evitar desembolsos importantes. Claramente resulta indispensable considerar los pros y contras de cada alternativa teniendo en cuenta el uso que se le dará a cada unidad y rentabilidad a largo plazo.
Las principales ventajas del renting de coches
Esta opción ha transformado la perspectiva de muchos empresarios gracias a que ofrece numerosas prestaciones, tales como:
- El pago de una cuota mensual fija incluye todos los gastos del coche en cuanto a mantenimiento, seguro, impuestos, cambio de neumáticos, entre otros.
- Disponibilidad de un coche de sustitución en caso de que el vehículo presente alguna avería que implique su paralización.
- No es necesario disponer de una alta suma de dinero para contar con una flota de coches operativa que permita poner en marcha las actividades cotidianas de cualquier negocio.
- La gestión administrativa es mucho más sencilla. El empresario sólo debe reflejar en sus cuentas la cantidad correspondiente al pago de un servicio que será un gasto deducible en las declaraciones de impuestos.
- Estipular el plazo del contrato de alquiler permite que, al llegar a su fin, el solicitante tenga la posibilidad de actualizar a modelos más nuevos si así lo prefiere.
- No hay pérdidas de tiempo para gestionar trámites como la financiación ante una entidad financiera, contratación de seguros, mantenimiento del vehículo, pagos de impuestos, entre otros.
- La opción del renting de coches se incrementa cada día y esto abre las posibilidades de que la oferta sea mayor, con tarifas mucho más accesibles y ajustadas a los requerimientos empresariales.
