Por todos es sabido que la escasez de componentes y microchips está afectando a la producción de vehículos nuevos a nivel internacional desde hace ya varios meses, incluso en los últimos años. Lo que ha provocado que conseguir coches en Madrid o en cualquier otro punto de nuestra geografía se convierta en todo un reto.
Esta circunstancia está llevando a los consumidores, que no desean esperar por los largos plazos de entrega de ciertos vehículos nuevos, o que incluso no quieren pagar sus costes elevados, a acercarse al mundo de los coches usados o vehículos de ocasión. Dicha demanda, que se ha disparado en estos tiempos, está provocando una importante subida de precios en los vehículos usados, llegando incluso a superar el 30% en el aumento de precio en coches que superan los 10 o 15 años de antigüedad.
De este modo, tanto las empresas como los propietarios privados de dichos vehículos están encontrando oportunidades en estas transacciones. Por un lado, los propietarios pueden aprovechar esta situación para vender sus vehículos antiguos a un mejor precio del que podrían haber conseguido hace pocos años y de este modo invertir los beneficios en un vehículo nuevo o incluso en otro vehículo de ocasión o coches km0.
Por otra parte, las empresas están invirtiendo tiempo y dinero en optimizar, modernizar y digitalizar sus procesos de tasación y compra de coches usados, con el objetivo de no quedarse atrás en la creciente demanda de vehículos de este tipo y ser un punto de referencia para los consumidores entre tanta oferta, que actualmente se encuentra disparada.
En los coches de ocasión o segunda mano más vendidos, predominan los de más de diez años, seguidos por aquellos vehículos que cuentan con una edad de entre seis y diez años. Quedan algo más atrás en las compra-ventas aquellos coches entre tres y cinco años de antigüedad.
Los coches diésel son los de motorización más vendida en este sector, seguidos por los de gasolina. No obstante, son vehículos que empiezan poco a poco a descender en estas transacciones, dando paso a los vehículos eléctricos. Estos últimos se encuentran aún muy alejados de los números logrados por los coches de combustión, pero comienzan a hacerse un pequeño hueco en el mercado de ocasión, a pesar de ocupar todavía números muy reducidos y no destacar aún en el interés de los consumidores a la hora de comprar y vender vehículos usados.
Dentro de las marcas y modelos más vendidas, por sus buenas cifras de matriculación de los últimos años, son el Volkswagen Golf, Seat Ibiza y León, seguidos de los Renault Megane y el BMW Serie 3. Lo que los convierte en vehículos muy demandados tanto a la hora de adquirirlos por parte de clientes particulares, como por las empresas que ofrecen servicios de tasación y compra-venta de vehículos de segunda mano.
Se confirma en este 2022 que la situación global de los últimos dos o tres años está impactando de manera considerable en el sector del automóvil. Un sector que ya se había visto afectado por su necesaria innovación y modernización en los últimos años, pero que ahora afronta momentos de alta incertidumbre tanto desde el punto de vista empresarial como del propio consumidor.
Esta circunstancia está llevando a los consumidores, que no desean esperar por los largos plazos de entrega de ciertos vehículos nuevos, o que incluso no quieren pagar sus costes elevados, a acercarse al mundo de los coches usados o vehículos de ocasión. Dicha demanda, que se ha disparado en estos tiempos, está provocando una importante subida de precios en los vehículos usados, llegando incluso a superar el 30% en el aumento de precio en coches que superan los 10 o 15 años de antigüedad.
De este modo, tanto las empresas como los propietarios privados de dichos vehículos están encontrando oportunidades en estas transacciones. Por un lado, los propietarios pueden aprovechar esta situación para vender sus vehículos antiguos a un mejor precio del que podrían haber conseguido hace pocos años y de este modo invertir los beneficios en un vehículo nuevo o incluso en otro vehículo de ocasión o coches km0.
Por otra parte, las empresas están invirtiendo tiempo y dinero en optimizar, modernizar y digitalizar sus procesos de tasación y compra de coches usados, con el objetivo de no quedarse atrás en la creciente demanda de vehículos de este tipo y ser un punto de referencia para los consumidores entre tanta oferta, que actualmente se encuentra disparada.
En los coches de ocasión o segunda mano más vendidos, predominan los de más de diez años, seguidos por aquellos vehículos que cuentan con una edad de entre seis y diez años. Quedan algo más atrás en las compra-ventas aquellos coches entre tres y cinco años de antigüedad.
Los coches diésel son los de motorización más vendida en este sector, seguidos por los de gasolina. No obstante, son vehículos que empiezan poco a poco a descender en estas transacciones, dando paso a los vehículos eléctricos. Estos últimos se encuentran aún muy alejados de los números logrados por los coches de combustión, pero comienzan a hacerse un pequeño hueco en el mercado de ocasión, a pesar de ocupar todavía números muy reducidos y no destacar aún en el interés de los consumidores a la hora de comprar y vender vehículos usados.
Dentro de las marcas y modelos más vendidas, por sus buenas cifras de matriculación de los últimos años, son el Volkswagen Golf, Seat Ibiza y León, seguidos de los Renault Megane y el BMW Serie 3. Lo que los convierte en vehículos muy demandados tanto a la hora de adquirirlos por parte de clientes particulares, como por las empresas que ofrecen servicios de tasación y compra-venta de vehículos de segunda mano.
Se confirma en este 2022 que la situación global de los últimos dos o tres años está impactando de manera considerable en el sector del automóvil. Un sector que ya se había visto afectado por su necesaria innovación y modernización en los últimos años, pero que ahora afronta momentos de alta incertidumbre tanto desde el punto de vista empresarial como del propio consumidor.
